La denuncia ante la Intendencia de Montevideo por un chofer profesional, produce el acuerdo del Congreso de Intendentes para abolir algunos códigos reflejados en el documento.
La libreta de conducir y su renovación de confidencialidad
Tras unos problemas de corazón de los que pudo recuperarse, el chofer profesional D.V. comprobó como fue rechazado en varias ofertas de trabajo a las que se presentó, ya que en su libreta de conducir, tras la renovación la IM (Intendencia de Montevideo) reseño a través de los códigos P02, P63 y P11 la dolencia cardiaca que había sufrido meses atrás. Los intendentes decidieron eliminar la información sobre la salud que no pueda ser certificada por la inspección de tránsito, ya que con una búsqueda en Google se podía encontrar que el profesional había padecido problemas cardíacos.
El área jurídica de la Intendencia de Montevideo recibió el caso y reconoció el problema suscitado cuando los códigos de restricciones de salud se establecen de dominio público y cualquier ciudadano puede conseguir esa información a través de la libreta de conducir.
Suprimir datos de salud
El Congreso acordó que se hiciera entrega al afectado de una nueva libreta de conducir con renovación sin costo y sin constancia alguna de las restricciones. Igualmente quedó abierta la discusión para eliminar los datos de salud de la licencia de conducir, tras lo acordado por los intendentes en su último plenario.
Tan solo deberían constar en el documento las correcciones a deficiencias físicas que sean efectivamente verificables por la inspección de tránsito, concluyó la sala de abogados del Congreso de Intendentes.
El consejero García (colorado), ha declarado que no tienen sentido que estén los datos sobre restricciones de salud en la libreta de conducir ya que tras la renovación se aprueba que la persona es apta para manejar.